18 septiembre 2012

Últimos días de votación

Como pasa el tiempo, hace casi un mes que escribí la anterior entrada sobre "Cinco notas para un recién llegado" y ya casi ha llegado el último día para poder seguir votando por él.


Ya sabéis que participamos en el concurso Tripomant na cidade y que para poder llevarnos algo es importantísimo sumar vuestro apoyo y conseguir votos. Si aún no lo habéis visto o votado os animo a que lo hagáis en los links que os dejo.

Por otro lado en Radio Obradoiro han hecho una pequeña entrevista a una de las organizadoras del certamen, ¿creemos entender que cita "Cinco notas"? parece que podemos estar ahí, animo y seguid votando, pasado mañana saldremos de dudas.



20 agosto 2012

Verano "na cidade"

El verano en Madrid sigue su curso, asfixiante y lento, la ciudad está vacía y la gente disfruta de sus vacaciones (los que pueden permitírselas) en los previsibles destinos de la costa.

¿Todos?, ¡No!. Un irreductible grupo de trabajadores audiovisuales sigue en la capital, encerrado, intentando hacer algo que merezca verdaderamente la pena con su vida.
Aquí en "Jcat", nombre que recibe ese ente extra oficial que nosotros llamamos "nuestra productora" (más allá de que la realidad socioeconómica nos permita atribuirle ese nombre seguido de un deseable "S.L."), no cerramos por vacaciones.

Ya he subido las primeras imágenes de "TOC", lo que será de aquí a unos meses nuestra gran apuesta para la temporada de festivales 2012-2013. Pero mientras tanto y para no perder la costumbre seguimos con la distribución del incombustible "Kitoko", y lo que es más importante a día de hoy:

Estamos participando en el concurso "Tripomant na Cidade 2.0" con el cortometraje "Cinco notas para un recién llegado".  El corto narra la historia de un padre que recorre la cuidad redactando (mentalmente) una serie de "notas" para su hijo non nato y está realizado expresamente para este concurso, organizado por una empresa que vende sistemas de aislamiento para construcción. 




El cortometraje opta a varios premios entre el que se incluye el del público. Para que podamos ganarlo y no solo optar a él os pediría que lo votaseis a través de este link: 

http://www.tripomantnacidade.com/?page_id=870 

El registro es extremadamente rápido y sencillo y yo, en nombre de mis compañeros os lo agradeceré encarecidamente.

16 julio 2012

Tic, Toc (Cuenta atrás)

Pasado el año y medio de estancia en Madrid había hambre de empezar un nuevo proyecto. 

Ayer, después de una maratoniana jornada de 14 horas de rodaje se puede decir que todo está en marcha. 

Por el momento no quiero comentar mucho acerca del nuevo corto de Leyre Cotilla, pero si algo puede asegurarse es que tiene muy buena pinta. 

Y para muestra un botón:


10 febrero 2012

No me digas que no se puede

Antes de acabar la fase de escritura del guión llega la parte más complicada, la reescritura.

Esto entraña uno de los peores momentos del guionista. Ese en el que tienes que renunciar a cosas. Has empezado escribiendo el guión por una imagen que te vino a la cabeza en un momento de lucidez, pero ahora te das cuenta que no sirve para nada, que la historia no avanza y te sobran cinco, diez, o hasta quince páginas.

Hay que tener claros un par de conceptos. La historia que te has montado en tu cabeza no va durar menos de un minuto por página porque tú lo digas. Eso implica la necesidad de cortar, porque nadie va a ir a ver tu corto de 20 minutos por el hecho de que sea tuyo y lo hayas hecho con mucho amor.

Es el momento en que el escritor se vuelve cirujano y mira apenado a su paciente para decirle "lo siento mucho, pero habrá que amputar".

Para muestra un Botón

Os dejo aquí un ejemplo de resumen que está participando este año en NotodoFilmFest: "Los Fantasmas no Existen" de Carlos Pantamaria. O como yo le llamaría: "Los otros" versión triple destilación (30 segundos)


01 febrero 2012

De tanto escribir no hay quien escriba

Cuando llevas un tiempo escribiendo un guión empiezas a pensar que el proceso no acabará nunca. Aún no he terminado con el primer borrador y ya estoy deseando ponerme a tachar frases y escenas completas, cambiarlas, moverlas... cada cosa a su tiempo.

A mi, como terapia, me viene bien estar escribiendo esto, porque a veces cuesta coger perspectiva. Pero parece que no hay nada como escribir una historia para que te vengan a la cabeza un montón de cosas que tienen (casi siempre) bastante poco que ver con lo que estás tratando de contar. Un buen ejemplo podría ser que el guión en que trabajo surgió mientras desarrollaba otra idea que ahora descansa en el fondo de armario de mi memoria.

A veces se me pasa por la cabeza que quizás ni siquiera llegue a grabar esta historia. Entonces lo pienso y descubro que me da igual, que tengo que acabarla y que después, si la acabo, me veré en la obligación moral de grabarlo porque, por una vez, estoy trabajando en algo realista y barato. Eso me anima a seguir.

He hecho varios cortos, pero si os digo la verdad, tengo la sensación de que nunca he acabado un guión. Tengo la impresión de que siempre he podido mejorarlos y no he sabido o no he tenido la calma y el oficio suficientes para hacerlo. Por eso, con esta historia, mi objetivo no es acabarlo y pasar página, si no escribirlo, mejorarlo e intentar hacer el corto. Será difícil, pero tengo que empezar a recordar que yo no me he venido hasta Madrid para pasarme vendiendo cámaras de fotos toda la vida.

31 diciembre 2011

2012 y la espiral del recorte

Aparece la crisis
Empezamos a hablar de la crisis
Gastamos menos

Explotan las burbujas (que no existían)

Los empresarios ingresan menos
Se destruye empleo
Gastamos menos

Nos echamos la culpa unos a otros
Ponemos remiendos
Ganamos menos (personas)
Ganamos menos (dinero)
Gastamos menos

El estado ingresa menos
Los empresarios piden más
Los bancos dan menos
Los trabajadores trabajan más
Los trabajadores ganan lo mismo o menos
Gastamos menos

Votamos lo mismo
Se recortan derechos
Se suben impuestos
Pagamos más
Recibimos menos
Tenemos menos, por lo tanto
Gastamos menos


Las leyes de la espiral son sencillas, es continua, es creciente y cada vez entran en liza más factores, pero siempre vuelve al mismo punto. Esta es solo mi forma de verla. ¿Os animáis a hacer la vuestra?

12 diciembre 2011

El tiempo de la crisis

Hoy es lunes, otro lunes al sol, como los de León de Aranoa (2002). Por aquel entonces a eso le llamábamos cine social, cine de los desfavorecidos. Una historia que resultaba (a los que no vivíamos al lado de Naval Gijón) desconocida y ahora parece tan familiar. Acabado el fin de semana y, por tanto, mi trabajo (si, de momento soy promotor). Llega otro lunes, estoy sentado en el salón, veo la tele y consulto las redes sociales.


Supongo que es gracias a gente como yo por lo que estos medios de comunicación social están subiendo como la espuma, tanto en difusión como en importancia. Pero ¿quién usa esto? ¿quién lo hace bien?.


Yo me creo lo suficientemente inteligente como para saber que ni soy tan importante como para generar información valiosa ni lo suficientemente idiota como para pensar que a alguien le interesa mi vida.


Continuamente escucho hablar de ofertas de trabajo para "comunity managers" y expertos en "redes 2.0", pero rara vez veo que se apliquen las teorías básicas sobre el uso de las mismas. Supongo que, a la larga, el feedback es un coñazo. También supongo que la mayoría de los usuarios de (por ejemplo) Twitter, son personas que se limitan a echar un ojo a los TT del momento, buscar en google news (en el mejor de los casos) y luego opinar sin criterio, porque eso no es informarse, eso no es saber.


Las redes sociales nos han facilitado el intercambio de conocimiento y nosotros las hemos usado para hablar de Sálvame, de Paquirrín, de Mourinho y (claro está) de Charlie Sheen.


El acceso a la tecnología se ha abaratado hasta extremos inverosímiles hace menos de una década y nosotros lo usamos para poner nuestros videos de borrachera en Youtube y sacarnos fotos de grupo demostrando lo felices que somos el sábado por la noche y subirlo al Facebook o al Tuenti bajo el título "Finde genial :-D!!".


Supongo que escribo todo esto porque llevo ya muchos lunes al sol y tengo la sensación de que estamos perdiendo el tiempo, de que algo bueno habrá que sacar de todo esto. Creo que las redes sociales son fuentes potenciales de saber y por eso también creo que deberíamos ser mucho más escépticos y pensar mucho más antes de entrar en los juegos que se crean dentro de estas inmensas máquinas de generar opiniones.